Con el paso del tiempo, el cristalino va perdiendo nitidez y se vuelve opaco, lo que se conoce como el desarrollo de cataratas. Este problema que dificulta la visión se puede resolver de forma segura y eficaz con una intervención que restaura la visión sustituyendo el cristalino por una lente intraocular.
Las cataratas consisten en la pérdida de transparencia del cristalino, que es la lente natural que está dentro del ojo y es fundamental para que podamos ver correctamente. La principal misión del cristalino es enfocar para ver de forma clara y nítida.
Tal y como explica la Sociedad Española de Cirugía Ocular Implanto Refractiva (SECOIR), el tamaño del cristalino es como el de una lenteja. A medida que pasan los años, se va volviendo opaco, pierde transparencia y se torna más rígido, causando la aparición de cataratas que impiden una visión adecuada.
Aunque las cataratas hacen que se pierda nitidez en la visión, a veces pasan desapercibidas en las primeras fases de desarrollo y solo se empiezan a hacer patentes al realizar algunas actividades específicas, como por ejemplo leer.
¿Cuándo consultar con el oftalmólogo por unas posibles cataratas?
Es importante que consultes con tu oftalmólogo si detectas uno o varios de los siguientes síntomas:
- Tener visión borrosa.
- No ver con nitidez los colores.
- Tener mala visión nocturna.
- Sufrir deslumbramiento por la noche.
- Ver de noche una aureola alrededor de un punto de luz.
- Visión doble.
Si te han diagnosticado cataratas, no te preocupes: gracias a la cirugía puedes corregirlas con seguridad y eficacia.
¿Cuándo está indicada la operación de cataratas?
En líneas generales, se recomienda llevar a cabo la operación de cataratas cuando una persona pierde calidad de vida asociada a sus problemas de visión, que le impiden realizar actividades de la vida cotidiana, como conducir, leer, coser, ver el ordenador… Es decir, cuando estas actividades no se pueden llevar a cabo ni siquiera con gafas.
En todo caso, será el oftalmólogo quien determine cuándo y mediante qué técnica ha de llevarse a cabo la intervención.
Ventajas de la operación de cataratas
La operación de cataratas se puede llevar a cabo a cualquier edad, siempre y cuando la realice un profesional cualificado y especializado en cirugía oftalmológica.
Si se tienen cataratas en ambos ojos, la intervención primero se hace en uno y, una vez recuperado, en cuestión de días o semanas, se pasa al otro ojo.
Existen distintos procedimientos para eliminar las cataratas. Entre los más frecuentes están:
- Facoemulsificación. Mediante este procedimiento el oftalmólogo realiza un pequeñísimo corte en el ojo y, a continuación, realiza una apertura de la cápsula del cristalino, para acceder a la catarata la cual fragmenta en diminutos trozos usando ultrasonidos, y los aspira ya fragmentados para retirarlos del interior del ojo. La capsula del cristalino se mantiene porque será la estructura donde irá alojada la lente intraocular que compensará las dioptrías equivalentes a las que aportaba el cristalino (que varían entre pacientes en función de si son miopes o hpermétropes pero que de media suelen ser entre 21-25 Dioptrias)
- Cirugía con láser femtosegundo. Es una variante de la anterior, que utiliza la tecnología del láser femtosegundo para hacer los cortes para acceder al interior del ojo, para corregir astigmatismos bajos, para realizar la apertura de la cápsula anterior a través de la cual trabajar, y para fragmentar el cristalino sin usar ultrasonidos, y que sea más fácil de retirar en una segunda etapa. Todos estos procedimientos se hacen sin abrir el ojo, ya que el láser actua penetrando a través de la córnea. En la segunda etapa ya se accederá al ojo para retirar los fragmentos del cristalino.
- Extracción extracapsular. Este procedimiento se utilizaba antes de disponer de la facoemulsificación. Por tanto, en la actualidad no se emplea con frecuencia y se reserva para los casos en los que no está indicada la facoemulsificación por la gran dureza de la catarata. Utilizando un pequeño instrumento, pero a través de una incisión hasta 4 veces más grande, el oftalmólogo extrae la catarata en una sola pieza, por lo que no la deshace en el interior del ojo. Al tener que hacer una incisión de mayor tamaño, el postoperatorio es más largo, y suele precisar puntos, además de que aumenta el riesgo de infección intraocular y de hemorragias internas.
Ventajas de la cirugía de cataratas asistida por láser de femtosegundo
Esta técnica es la que se realiza con mayor frecuencia para tratar las cataratas. Entre sus ventajas se encuentran las siguientes:
- Se puede diseñar de forma más exacta, centrada y reproducible la capsulotomía, que es la apertura de la cápsula anterior. Ajustándolo al tamaño de la óptica de cada lente intraocular, la lente queda mejor centrada y es más difícil la rotación y menos probable que la lente quede con una inclinación que pueda afectar a la calidad de la visión.
- Permite la realización de incisiones triplanares estancas.
- Mejora la capacidad para corregir el astigmatismo.
- Al realizar una fragmentación del cristalino previa, contribuye a que durante la facoemulsificación pueda emplearse menor energía de ultrasonidos, lo cual es siempre beneficioso para la córnea, fundamentalmente en casos de córneas con patología o córneas límite, ya que los ultrasonidos provocan un cierto grado de pérdida celular del endotelio corneal (que es quien mantiene la transparencia corneal), mayor cuanto más tiempo de ultrasonidos se usan. Por esta razón las córneas operadas con femtosegundo suelen estar más transparentes, sin edema, en el postoperatorio precoz.
- Automatiza ciertos pasos que facilitan maniobras en casos de anatomía compleja del ojo, como puede ser un ojo corto con poco espacio de maniobra, o una catarata muy dura, disminuyendo los riesgos quirúrgicos.
Como ya mencionábamos, una vez eliminado el cristalino por alguno de los procedimientos antes descritos, se introduce una lente intraocular que permite ver con total normalidad.
La incisión se cierra a través del autosellado, es decir, sin suturas, porque el corte en el ojo es tan pequeño que se puede sellar por sí mismo. No obstante, en el caso de necesitar suturas para cerrar la incisión, éstas tendrán que retirarse en las revisiones siguientes a la cirugía de las cataratas.
Tipos de lentes intraoculares para cataratas
Existen distintos tipos de lentes intraoculares que se emplean en la operación de cataratas. Las más frecuentes son:
- Lentes multifocales, que pueden ser trifocales o bifocales. Las trifocales son capaces de enfocar a tres distancias diferentes: de cerca, intermedia y de lejos. Las bifocales solo tienen dos focos: uno para ver de lejos y otro, para una visión cercana. Las lentes multifocales que se introducen en la operación de cataratas se hacen a medida de cada paciente teniendo en cuenta su problema de refracción, para corregir la visión de lejos pero también la de cerca. La principal ventaja de las lentes multifocales es que el paciente, una vez intervenido, es independiente de las gafas para ver con nitidez, tanto de cerca, como de lejos.
- Lentes monofocales. Con estas lentes se puede recuperar la visión de lejos, en distancias que superen un metro. Si se ve mal de cerca como consecuencia de la presbicia, es necesario utilizar gafas para realizar actividades como leer, coser o ver el móvil.
- Lentes de rango extendido. Son lentes que permiten una visión de lejos comparable a las lentes monofocales, pero que extienden la capacidad lectora a distancias intermedias y en algunos casos a cerca, aunque pueden necesitarse gafas para estar más cómodo en distancias de cerca.
- Lentes tóricas. Cualquiera de las lentes anteriores, trifocales, monofocales o de rango extendido, pueden ser tóricas. Lo que significa es que además de las características ya comentadas, corrigen el astigmatismo o “toro” que algunos pacientes tienen, y que sin corregirlo les impediría ver bien sin gafas. Están indicadas en pacientes con astigmatismo cercanos o superiores a 1 D.
Postoperatorio de la cirugía de cataratas
Una vez que el paciente ha abandonado el centro sanitario donde se ha llevado a cabo la operación de cataratas, debe seguir una serie de recomendaciones específicas, entre las que se incluyen:
- Mantener el ojo limpio.
- No frotar los ojos.
- Lavarse las manos antes de manipular el ojo.
- No maquillarse en los días posteriores a la operación.
- Evitar mojarse el ojo durante algunos días.
- No lavarse el pelo tras la intervención.
- Evitar coger peso y hacer esfuerzos.
Tras la operación de cataratas, es necesario aplicar unos colirios en el ojo con el fin de evitar la aparición de infecciones, y disminuir la inflamación. Asimismo, se deben seguir las instrucciones postoperatorias de forma precisa. Si no somos capaces de ponernos solos las gotas, hay que contar con la ayuda de algún familiar o cuidador para completar correctamente la pauta especificada.
Si tras poner las gotas pican los ojos, es muy importante no frotarse ni rascarse, y esperar un poco hasta que se pase el picor. El uso de lágrimas artificiales, que se suelen pautar junto con antiinflamatorios y antibióticos en colirio, también ayuda a una recuperación más rápida
No hay que asustarse si al principio se ve un poco borroso, molesta la luz o nos deslumbramos, ya que el ojo debe curarse, y adaptarse a su nueva situación. Lo suele hacer de forma rápida y en muy poco tiempo, y habitualmente tras la operación de cataratas ya se puede ver con mucha nitidez, aunque el primer día el paciente puede estar con la pupila aún dilatada.
Recuerda que, en la mayor parte de los casos, la recuperación y estabilización completa es de más o menos un mes. No hay que olvidar que el ojo necesita reposar y que pase cierto tiempo para adaptarse al cambio tras la cirugía.
A la hora de incorporarse a la vida cotidiana tras la intervención, hay que evitar hacer grandes esfuerzos, agacharse o coger cosas de gran peso. No obstante, es importante mantenerse activo y vital, por lo que se recomiendan actividades ligeras como caminar.
En cuanto a la conducción de vehículos, se deben seguir las recomendaciones del oftalmólogo una vez valore la evolución de la visión tras la cirugía.
Complicaciones de la operación de cataratas
Ninguna cirugía está exenta de riesgos, pero la operación de las cataratas, si se hace en un centro especializado y por profesionales entrenados, es una intervención segura y eficaz.
No obstante, pueden aparecer algunas complicaciones, como por ejemplo una infección, algo de sangrado, cierta inflamación ocular o pérdida de visión.
Ante cualquier problema, aunque sea mínimo, hay que acudir rápidamente al oftalmólogo para que haga una revisión completa de los ojos, identifique el problema y proponga la solución más adecuada. Por eso, es importante contar con un equipo de profesionales que esté disponible para resolver cualquier inconveniente que pueda surgir.
